Reseña Cultural: 2138 // Reseña Literaria: 613
Reseña actualizada. Publicada el 6 de enero del año 2008 en Lux Atenea.

Información Muy Importante / Very Important Information:
Esta reseña ha sido escrita por un ser humano, no por una Inteligencia Artificial / This review is a human writing, not an Artificial Intelligence writing

Publicado por: EDICIONES SM
ISBN: 84-675-2044-6
Edición: 2007 (EDICIÓN COMPRADA)

“A veces, el tiempo cambia las cosas como por arte de magia.”

Desde siempre me ha encantado leer cuentos, encontrando ese concentrado elixir de palabras cuya esencia y trasfondo hay que ir descubriendo poco a poco, detalle a detalle, en sucesivas lecturas. Muchos cuentos van mucho más allá de la primera aventura a través de sus páginas y, atrapados por la curiosidad y por la sorpresa, están un paso por delante de nuestra inmersión mental. Por este motivo, en cada nueva lectura siempre descubriremos ese mensaje oculto que nos dejamos atrás y no vimos en su momento, y que curiosamente hemos podido desvelar pasado un tiempo, ya sea a través de esa atenta nueva relectura o gracias al nuevo estado de consciencia por la evolución de nuestra personalidad. De esta forma, esta reseña sobre “La Invención de Hugo Cabret” es fácil que no fuera lo mismo si lo escribiera dentro de unos años, y no en esta primera lectura tras su reciente publicación. Como los bibliófilos lectores de Lux Atenea ya saben, esta es la magia del mundo de los cuentos. Son inmutables y, a su vez, distintos en cada momento. Incluso la compra de este libro ha sido de lo más curiosa. Mirando las estanterías de una librería, me quedé sorprendido con el brillo que tenía el oscuro lomo de un libro. Picado por la curiosidad vi su título, “La Invención de Hugo Cabret”, y, tras abrirlo, me quedé hechizado con su estética, con sus dibujos, con estos márgenes y marcos que tanto me gustan en los libros. Finalmente convencido tras abrir y leer algunas páginas al azar, la compra fue casi inmediata. El librero me preguntó si quería una bolsa, pero no me hacía falta. Según saliera de la librería empezaría a leerlo. De nuevo, el universo literario concentraría mi atención y rompería con este presente al que tanta sal existencial le hace falta siempre. ¡Cuánta perspectiva vital se nos escaparía en nuestra vida si no existiera la literatura!

“El relojero descansaba cómodamente en el fondo del río; no quería que lo molestaran, así que su fantasma siguió cuidando de los relojes.”

“La Invención de Hugo Cabret” nos cuenta la historia de un muchacho cuyo sueño es la puesta en funcionamiento de un autómata encontrado entre los escombros de un museo, incendiado tiempo atrás. El autómata contiene un mensaje, un secreto que solamente podrá ser revelado cuando sea reparado, cuando el movimiento le dé vida porque la vida es eso mismo… movimiento. Para lograr esta activación, Hugo habrá de superar una serie de dificultades que le llevarán a situaciones de lo más inesperadas y, en esa búsqueda de la clave, conocerá a una serie de personas cuyos lazos con su pasado le sorprenderán porque Hugo es huérfano, viviendo en una estación de trenes gracias al ingenio que permite la supervivencia. Su pasión por las máquinas en movimiento no es nada casual. Alejado de la vida urbana, del contacto directo con los seres humanos, encuentra en las máquinas esa conexión vital que nunca le ofrecen sus propios congéneres. Como los bibliófilos lectores de Lux Atenea podrán imaginar, Hugo vive con la semilla de la misantropía creciendo en su interior porque el miedo al ser humano es mucho más fuerte que la atracción de sus supuestas bondades. Además, un cuaderno propiedad de Hugo se convierte en una de las piezas clave en la evolución de esta interesante historia, porque ese cuaderno no es un simple cuaderno. Es el único camino que conoce para poder llegar a descubrir algunas lagunas de su pasado que tanto lo atenazan y torturan psicológicamente. El pasado es una pesada losa colocada sobre él, y que prácticamente lo inmoviliza. También es una cadena que lo obliga a vivir en un espacio limitado bajo la ilusión de la seguridad, porque Hugo tiene en su interior eso que tanto oprime y condiciona la vida del ser humano: el miedo.

“Me gusta imaginar que el mundo es un enorme mecanismo. A las máquinas nunca les sobra nada, ¿sabes? Siempre tienen las piezas justas para funcionar.”

El resto de la historia queda en manos del lector de esta reseña. No voy a desvelar esta interesante trama tan inmersiva, porque tiene la maravillosa capacidad de pasar de las palabras a la imagen con una facilidad tan solo comparable con la belleza de las ilustraciones realizadas por el propio escritor Brian Selznick. En “La Invención de Hugo Cabret” encontrarán una obra tan cautivadora que su destellante acción se compone de secuencias vertebradas en páginas y dibujos. Mentalmente, te sumergen fácilmente dentro de la escena y en su desarrollo. Los cultos lectores de Lux Atenea quedarán maravillados al contemplar estas ilustraciones cargadas de detalles y de donde afloran sentimientos, y todo mostrado y definido con un realismo visual que les provocará admiración. “La Invención de Hugo Cabret”, un libro que será muy especial dentro de su biblioteca, y la obra literaria ideal para ser elegida como regalo destinado a un ser querido. ¡¡¡Disfrútenlo!!!

“Si dejas de tener un propósito en la vida es como… como si te rompieras.”

Félix V. Díaz
En Lux Atenea solamente escribo y publico reseñas sobre ediciones originales que he comprado, o recibido como promocional.