Reseña Cultural: 1638 // Reseña Cómic: 11

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Esta reseña ha sido escrita por un ser humano, no por una Inteligencia Artificial / This review is a human writing, not an Artificial Intelligence writing

Reseña actualizada. Publicada el 15 de junio del año 2009 en Lux Atenea.

Quiero dar las gracias al genial artista PACO ROCA por su cortesía al dedicarme esta edición.

Publicado por: ASTIBERRI EDICIONES
ISBN: 84-96815-91-9
Edición: 2009 (EDICIÓN COMPRADA)

Esta historia comienza con nuestro protagonista dándose un capricho un tanto ‘freak’. Habiendo quedado con su novia María en una sucursal bancaria para firmar la hipoteca de su nuevo piso, el tiempo se acaba echando encima y, tras buscar un atajo a través de callejuelas que le permita poder llegar a tiempo a la cita, acaba perdiéndose en el Barrio Viejo de su ciudad. Debido a que también se queda sin cobertura en el móvil, no puede avisar a su novia de este contratiempo, y yendo de un lugar a otro en esas calles laberínticas donde la noche parece estar esperando a la vuelta de cada esquina, termina encontrando un hotel habitado por gente un tanto extraña. Cuando la ilógica empiece a acosarle al encontrarse con personas que llevan treinta años perdidas en esas calles, el tiempo, el día, la noche, todo se manifestará de forma caótica ante su incrédula mirada como si acabara de adentrarse en el reino de los sueños. Por desgracia, todo lo que le rodea es real. “Las Calles de Arena” es un elaborado e inteligente cómic creado por el genial artista Paco Roca, y en esta trama tan cautivadora nos habla sobre las obsesiones que atormentan y limitan a gran parte de la especie humana, provocando un estado de consciencia alterado que lleva a muchos a sentirse totalmente perdidos en este mundo. Con conversaciones que animan a la reflexión ante la profundidad del mensaje que se está leyendo, Paco Roca sorprenderá al culto lector de Lux Atenea con lo aleatorio omnipresente en todo. Un guión sutil y claro donde las frustraciones están personificadas en individuos que tratan de utilizarlas como justificación perfecta para no comportarse en la vida como son ellos mismos en realidad, aceptando compulsivamente a moverse socialmente dentro de unos comportamientos repetitivos con tal de no luchar por salir de su insatisfactoria existencia. El lector encontrará en esta obra un cómic con personajes fascinantes, a cual más complejo e interesante. Tanto el misterioso señor Doppelgänger; Esther, la recepcionista siempre quejosa; el señor Rosendo de los Vientos, un manitas descamisado; la enigmática Blanca, la cartera muda; el coronel Francisco Piedra, clonador por sentimentalismo; o el estrafalario conde Diógenes, un apasionado del coleccionismo, provocan sentimientos de identificación psicológica hacia cada uno de estos personajes tan particulares. Actualmente, qué difícil es encontrar en un universo artístico tan competitivo como es el mundo del cómic, a un creador de personajes y de personalidades tan amplio, diverso, y con tanto encanto como Paco Roca. Fuertemente influenciado por grandes maestros de la literatura como Julio Cortazar, Kafka, Jorge Luis Borges, Lewis Carroll… e impresionado con la historia de “Alicia en el País de las Maravillas”, Paco Roca convierte la metáfora en la columna principal que ha de vertebrar toda esta historia, llevando al lector a un final a lo grande gracias a este desenlace tan humano como apoteósico.

En el apartado gráfico, los dibujos están realizados a todo color, predominando los colores ocres cuando la escena es diurna, o los tonos oscuros hasta casi llegar a la difuminación del entorno en cuanto la noche hace acto de presencia. Sorprende comprobar cómo Paco Roca no llega a utilizar el color azul para pintar el cielo diurno y, en cambio, los cielos nocturnos siempre conservan un estado lumínico cercano al último punto antes del total anochecer. Los tonos marrones, naranjas, violetas, amarillos, verde oliva… predominan en todas las viñetas, reflejando la luz en este mundo iluminado indirectamente. Aquí todo está filtrado, tamizado, creando un ambiente bohemio y decadente que refuerza más aun el mensaje vital en torno al cual gira toda esta historia. El dibujo de los personajes está realizado con bordes perfilados para resaltar las formas, y en el diseño de los escenarios lo que prevalece es ofrecer al lector una sensación de amplitud total, como si al mirar cada viñeta tuviera la misma sensación de estar mirando al mundo moverse a través de una ventana. Con espectaculares dibujos como la impresionante visión del Hotel de la Torre, o del puerto abandonado, o al observar esas peligrosas escaleras quebradizas desprendiéndose de la cornisa… la atención y la concentración que provoca su lectura se convierte en un auténtico placer visual para los amantes del buen cómic. En “Las Calles de Arena”, Paco Roca logra mantener al lector constantemente intrigado con esta historia existencialista, y detalles como poner un ejemplar de “Tintin en el Tíbet” en las manos del personaje principal, presentarnos a esta recepcionista de hotel enganchada al libro “Memorias de África”, o imaginar curiosos personajes que tratan de meterse dentro de la ropa del protagonista, dan un toque artístico muy especial a esta obra mágica. “Las Calles de Arena”, grandioso cómic basado en la ansiedad existencial de la vida humana, en el autoengaño, y sobre las falsas esperanzas personales. ¡¡¡Disfrútenlo!!!

Félix V. Díaz
En Lux Atenea solamente escribo y publico reseñas sobre ediciones originales que he comprado, o recibido como promocional.